Como humo en la boca
se deshace la vida en mil volutas.
Girando se van, como las horas,
en piruetas artísticas maravillosas o
en temibles monstruos incorpóreos.
Un placer engañoso al principio
se transforma en amargo paladar.
¡Lo que tanto nos gustó antaño,
en veneno se ha transformado hogaño!
La vida se consume inmisericorde,
tóxica e imparable:
mancha amarilla en los dedos y oscura en el alma.
Josefa
No hay comentarios:
Publicar un comentario